Los individuos que pertenecen al Reino Mónera son unicelulares y procariotas. Sus integrantes son las bacterias y cianobacterias o algas Verdi-azuladas.
Los organismos procariotas no tienen membrana nuclear. Cómo no poseen un verdadero núcleo el material genético se encuentra en el citoplasma en una zona conocida con el nombre de zona nuclear.
La reproducción es asexuada, por fisión binaria por lo tanto las células hijas son clones de las células madres. El material genético se encuentra en un solo cromosoma circular adherido en un punto a la cara interna de la membrana plasmática. Una de las causas de la variabilidad genética en las bacterias es producida por el intercambio de plásmidos o pequeñas porciones de ADN.
Son heterótrofos o autótrofos (foto sintetizadores o quimio sintetizadores) y en la pirámide trófica caracterizaríamos a las bacterias como organismos descomponedores.
Comúnmente se clasifican según tres criterios: por su nutrición, su forma y agrupaciones y también por su interacción con el ser humano.
Pueden llevar vida libre o asociarse a otros seres vivos, entonces se dice que son simbióticas. Por ejemplo nosotros tenemos unas bacterias que viven en nuestro intestino que nos ayudan a fabricar vitamina K, en este caso son endosimbióticas.
El hombre usa las bacterias para fabricar yogur, vinagre, pan... Investiga con ellas en ingeniería genética para fabricar medicamentos, para controlar las contaminaciones de crudo en el mar y un largo etcétera. Aunque también lucha contra ellas por ser la causa de muchas enfermedades infectocontagiosas como el tétano, cólera, tuberculosis y demás patologías.
Las bacterias pueden ser alargadas, bacilos, redondas, cocos, que agrupadas se las conoce como estreptococos si forman largas cadenas, estafilococos si los hacen en racimos. Algunas han adoptado forma de coma, los vibrios; también las encontramos haciendo espirales como las espiroquetas o los espirilos.
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